Me han encerrado. Este aire,
cargado de preocupaciones y miedo, me ahoga. Y tú eres mi captor.
Sabes de mi existencia; a veces
incluso me deseas. Sin embargo, me escondes. Has dejado pasar el tiempo,
creyendo que un día llegaría el momento de liberarme e incluso trabajar
conmigo. Pero ese momento aún no ha llegado, o al menos eso crees. Y mientras
has estado esperando ese instante que pasó hace tiempo, yo he ido marchitándome
en esta cárcel de temores y dudas. Me has convertido en una sombra de lo que
fi, y me has encerrado en una jaula que después has escondido, y que no es más
que el recordatorio de lo que pudo haber sido pero nunca fue.
Libérame. No reprimas más tu alma
onírica. No soy un objeto de museo para ser expuesto en una vitrina; soy un
fantasma en movimiento al que debes perseguir. Te prometo una vida agitada, con
dificultades, pruebas y quizá algún
fracaso. Pero no te rindas. Sé que te da miedo, y sé también que aun así lo
deseas. No va a ser un camino fácil, ni vas a hacerlo en poco tiempo. Te
preguntas “¿por qué debería aceptar semejante oferta?”, y te comprendo. Con
todo lo que te he prometido, no parece un camino de rosas. Y no lo es. Pero la
recompensa vale la pena.
Al fin y al cabo, tú me creaste.
Sin ti, mi existencia no tiene sentido. Necesito que vengas detrás de mí. Que
me persigas. Que no te rindas. Me siento bien cuando lo haces, y tú también
necesitas para poder sobrellevar esa carga llamada vida. Pero si, en cambio, te
dejas dominar por tus miedos, tu incertidumbre, tu pereza… y a consecuencia de
eso te niegas a empezar a correr, nada servirá de nada. Tu vida mediocre te
consumirá, y a mí, la soledad y la opresión cavarán por marchitarme.
Así que déjate de excusas.
Levántate, el momento que estabas esperando es AHORA. Yo no estaré ahí para
siempre, tú lo sabes. Conque apresúrate. Cierra los ojos y deja que tu corazón
te guíe.
Soy un fantasma en movimiento. Y
te estoy esperando. Persígueme, no te rindas.
Atrápame si puedes.
Firmado,
Un Sueño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario